Día del libro

Día del libro

ESCRIBE CON EL CORAZÓN, REPASALO DESPUÉS CON LA CABEZA. VERÁS EL RESULTADO...

ESCRIBE CON EL CORAZÓN, REPASALO DESPUÉS CON LA CABEZA.                       VERÁS EL RESULTADO...

jueves, 23 de septiembre de 2010

Haciendola regresar



Tras años sin ser capaz de tallar, se encajó su bata blanca, marchó a su taller dispuesto a coger cincel y martillo; para tratar de seguir el trabajo que empezó cuando marchó de su lado.


Sus manos se acercaron a la piedra, el contacto frio le estremeció. Percibía en sus adentros como le pedía lo que quería ser, era como entrar dentro de ella y ver su creación terminada. Cerró los ojos y se dejo llevar por las voces que escuchaba hasta que las lágrimas rodaron por su cara. Al terminar la tarde la presencia de su madre estaba viva en aquel trozo de mármol blanco.

16 comentarios:

  1. Dar vida a la piedra con el recuerdo de la madre...

    ResponderEliminar
  2. ¡Que bella imagen has elegido para un recuerdo vivo!

    ResponderEliminar
  3. Esta actividad hace vivir al que no está, o lo entierra más en su caso, lo hay para todo. En tu caso lo has escogido con bellas palabras, para emocionar,...

    ResponderEliminar
  4. Bueno... aquí hay mucha sensibilidad, son las 8:12 h. de la mañana, me auguras muy buen día.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  5. Imagen apropiada, bellas letras sacadas del corazón y escritas desde la sensibilidad del alma.

    Una madre bien merece algo asi ¿no?

    Gracias Pedro, Mercedes, Jesús y José Alfonso. Un beso a los cuatro

    ResponderEliminar
  6. Coincido con José Alfonso y Pedro Ojeda, cuánta ternura y delicadeza para tratar un asunto tan íntimo y respetuoso como es la evocación y la alusión a la memoria de alguna tan querido e importante en nuestra vida como es una madre.

    Está muy bien escrito e incluso me ha parecido una analogía muy original: esculpir la memoria como un artista, con el suave golpe de un cincel... genial.

    saludos.

    ResponderEliminar
  7. Lola me encantó! Todas las madres merecemos algo así!!
    besitoss

    ResponderEliminar
  8. La piedra a veces como esta, se talla con los buriles del corazón.

    Saludos cordiales,
    es un verdadero placer leerte... gracias

    ResponderEliminar
  9. "Madre" con todo su significado y lo que conlleva se merecen todo y cuanto le podamos ofrecer y más si cabe. Besitos. Mª Paula

    "los buriles del corazón" me encantó. Gracias Mistral

    ResponderEliminar
  10. ¡Hola Lola!
    Debió ser un buen escultor, y también un buen hijo.

    Saludos de J.M. Ojeda
    Buen fin de semana.

    ResponderEliminar
  11. Previamente...la madre,hace unos años,lo esculpio a el en carne y hueso con el cincel de los genes ,dandole forma desde lo mas profundo de su ser,nunca mejor dicho.Ahora el la esculpe a ella en piedra y derrama las lagrimas que por el ,ella derramo mas de un dia y mas de una vez.Muy emotivo Lola miles de besabrazos

    ResponderEliminar
  12. Seguramente porque cuando te quedas incapacitado para seguir andando al perderla, es una señal de que fue asi. Buen fin de semana para ti tambien J.M. Ojeda

    Jose, tu y tus comentarios que me ponen los pelos como escarpias ufffff...... Besabrazos catalan, muchos miles de besabrazos...

    ResponderEliminar
  13. andaluces de jaen...hermosa bella canción-poema...poema,me gusta Lola como escribis y describis...eres una poeta1 con todas las letras!
    muchas gracias por pasar por el blog,se agradece mucho! estamos en primavera,hace frio,llueve, nada de primavera!
    un abrazo
    lidia-la escriba

    ResponderEliminar
  14. Upsss, has provocado lagrimas en mis ojos. Gracias lidia, me gusta tu blog y lo que me gusta lo vivo por ello comento para formar parte de el de una forma u otra. ¿poeta? creo que me queda mucho que aprender, quizá volcarme desde dentro ayude a que salga bien pero todavía hay mucho camino que andar sino todo.

    ResponderEliminar
  15. Recuerdos que "agüitan" los ojos, como aquí decimos...

    ResponderEliminar
  16. "agüitan" me gusta como suena. Besitos

    ResponderEliminar