Día del libro

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ESCRIBE CON EL CORAZÓN, REPASALO DESPUÉS CON LA CABEZA. VERÁS EL RESULTADO...

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domingo, 14 de marzo de 2010

A LA CIUDAD QUE ME ADOPTÓ



Ciudad de Luz como dice la canción

Espacio lleno de belleza, acogedora

Donde en años encontré tristezas y alegrías

Desde hace treinta y nueve hasta ahora



Me abrió sus puertas al llegar

Me enamoró con su dulce belleza

Me enardeció con su historia

Que nunca termina, siempre empieza


Calles vestidas de encanto sefardí

Empinadas al pie del cerro

Olivos que nos rodean

Verdes montes de aceituneros


9 comentarios:

  1. Me parece estupendo como describes a la ciudad que te adoptó.
    Yo no tengo de momento nadie que me adopte, y de eso hace ya un montón de años.
    La mía la llevo en las sangres que corre por mis venas.

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  2. Igual que una vez dijiste de Guadix,un trozo de nuestra querida Andalucia,media vida mia pertenece a ella, recientemente lei un poema de Miguel Hernandez, precisamente de Jaen tambien, besos y abrazos

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  3. Andaluces de Jaén,
    aceituneros altivos,
    decidme en el alma: ¿quién,
    quién levantó los olivos?

    No los levantó la nada,
    ni el dinero, ni el señor,
    sino la tierra callada,
    el trabajo y el sudor.

    Unidos al agua pura
    y a los planetas unidos,
    los tres dieron la hermosura
    de los troncos retorcidos.

    Levántate, olivo cano,
    dijeron al pie del viento.
    Y el olivo alzó una mano
    poderosa de cimiento.

    Andaluces de Jaén,
    aceituneros altivos,
    decidme en el alma: ¿quién
    amamantó los olivos?

    Vuestra sangre, vuestra vida,
    no la del explotador
    que se enriqueció en la herida
    generosa del sudor.

    No la del terrateniente
    que os sepultó en la pobreza,
    que os pisoteó la frente,
    que os redujo la cabeza.

    Árboles que vuestro afán
    consagró al centro del día
    eran principio de un pan
    que sólo el otro comía.

    ¡Cuántos siglos de aceituna,
    los pies y las manos presos,
    sol a sol y luna a luna,
    pesan sobre vuestros huesos!

    Andaluces de Jaén,
    aceituneros altivos,
    pregunta mi alma: ¿de quién,
    de quién son estos olivos?

    Jaén, levántate brava
    sobre tus piedras lunares,
    no vayas a ser esclava
    con todos tus olivares.

    Dentro de la claridad
    del aceite y sus aromas,
    indican tu libertad
    la libertad de tus lomas.

    Escucha la versión de Paco Ibañez es genial http://www.youtube.com/watch?v=QxeFEBSAOUs&feature=player_embedded

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  4. Tengo todo Paco Ibañez, primero en vinilo y ahora en toutube.

    Parece que estas satisfecha de tu ciudad. Eres una mujer afortunada.

    Y sabes ser agradecida.

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  5. Es de bien nacido ser agradecido, me parece entender que no fue el lugar donde naciste, por tanto es grato, y lo mejor que puedes vivir, amar lugar donde habitas.
    Yo solo he visto tu ciudad una sola vez, de eso hace 30 años, y también quede enamorado, sobre todo me choco ver tanto olivo, tocando los bordes de la ciudad.
    Viaje desde Badajoz, solo por ver una mujer, que conocí en un tren, nunca más supe de ella, la suerte es que no me enamore, pero aun conservo sus cartas.
    Los recuerdos siempre son buenos.
    Tu canción siempre me ha gustado, y la canto a veces con mi basta voz.
    Ahora entiendo porque se reflejan las aceitunas en tus ojos.

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  6. No es mi ciudad así es pero la siento tan dentro que es como si hubiera nacido aqui. Lamento mucho que no la encontraras.

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  7. Si que la encontré, pero eso fue todo, volví de donde vine.
    Nunca más aquella relación fue lo mismo.
    Paso el tiempo y ya ves, lo recuerdo.
    No siempre, subir al tren te da lo que buscas.
    En cambio hoy se donde esta lo que quiero, y me quitaron las vías que me llevan a esa estación.
    Permíteme, sea partir de ahora, pasajero de tu tren, pero bajare en una estación cualquiera, solo busco que me de el aire en tu vagón, ver, mirar leer, en fin, estar sin ser.

    Pasajero sin destino.

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  8. Lo inteligente en la vida es coger el tren y si las cosas no salen como esperamos o deseamos, pues siempre estamos a tiempo de volver al lugar de partida. Bienvenido a mi tren, tu tren, el tren de las personas que pasan aunque algunas solo lo visitan, te aseguro que hay de l@s que se quedan. Siéntete como en tu casa y gracias por ser un pasajero más. Solo matizar que te bajaras cuando estimes oportuno hacerlo, ni antes ni después. Disfruta de mi mundo ya que este blog es un trocito de mi. Buen viaje, espero que te guste la travesía.

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  9. Hasta ahora todo me ha gustado, me es muy familiar todo, y el modo que tienes de explicarlo.
    Tomo billete de largo recorrido.

    Pasajero sin destino.

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