Podría preguntar al destino, ¿porque tardó tanto en cruzarme en tu camino? Pero sería una forma tonta de desperdiciar el tiempo, cuando puedo disfrutarlo sintiéndote tan dentro de mí.
No pasa un segundo que no te enredes en mi pelo,
ni un aliento del que no formes parte.
Tu ser como ofrenda a mi lado siempre,
la distancia no disipa mi deseo de amarte.
Tan presente y tan real.
Apreciándote tan dentro de mí.
Cierro mis ojos, puedo olerte
me estremezco, te percibo sí.
No imagino mi mundo sin tus ojos,
A tu lado no hay capítulos sin terminar,
No existe término medio,
sabes descubrir cómo hacerme vibrar.
Capacidad para dar luz a mi existencia.
Rozando mi piel, me haces exclamar
gemidos contenidos de deseo,
las horas vuelan no te dejan respirar.
La magia puede estar en cualquier lado,
lo lamentable sería pensar que no es a mi vera,
pero tu hechizo me hace retemblar,
demostrando que la realidad a la ficción supera.
Al galope y sin parar
Entre la muerte y la vida
Marcha y vuelve sin cesar
La sinrazón me domina
Cierro la puerta para que no entre el frío
Se zarandea mi cuerpo solo con rozarme
Entras en mí y siento consuelo.
Bálsamo del que no quiero separarme
Aprieto fuerte
Ahora viene lo mejor
“te quiero”
El alma se te abre en dos
No puedo imaginar la vida sin ti,
sin este dulce regreso que llega.
Puerta abierta que revuelve mi vida,
aporte de amor que no cesa.
Pasión aletargada hasta el regreso
Das, quitas, das, quitas
Entramado de sueños realizados
Das, quitas, das, quitas